miércoles 27 de marzo de 2024
“LATIDOS SIN PAUSA” INTEGRA LA RED DE SOBREVIVIENTES DE ABUSO ECLESIÁSTICO

ONG cuestionó a la Comisión de Abusos Sexuales del Obispado

Valoró la iniciativa, pero consideró que se le debe dar participación a otros sectores para garantizar imparcialidad.

Por Redacción El Ancasti

“Y si tu ojo te es ocasión de pecar, arráncatelo y échalo de ti. Te es mejor entrar en la vida con un solo ojo, que teniendo dos ojos, ser echado en el infierno de fuego”, (Mateo 18,9). La creación de la Comisión de Abuso Sexual –recientemente creada por el Obispado y que comenzará a funcionar en febrero- ya genera polémica. La ONG catamarqueña “Latidos sin Pausa”, que integra la Red de Sobrevivientes de Abuso Eclesiástico, valoró la iniciativa pero consideró que podrían tomarse otras medidas para lograr mejores resultados.

Alejandra es la mamá de la adolescente que denunció al sacerdote Juan de Dios Gutiérrez; el cura debe responder por el delito de “abuso sexual con acceso carnal agravado por ser ministro de un culto religioso”, que prevé una pena de ocho a 20 años de prisión. El hecho salió a la luz a finales de octubre de 2015.  Gutiérrez estuvo privado de su libertad hasta el 2 de diciembre de 2015. Luego de un largo litigio, la causa fue elevada a juicio y el debate se desarrollará en la Cámara Penal de Tercera Nominación. Aún no se fijó fecha pero ella está esperanzada, después de un largo camino recorrido. Nadie le contó de qué se trata; sabe, en carne propia, lo que es esperar la justicia de los hombres. Habla desde la experiencia, bastante amarga, que vive con su familia. Su lucha la llevó a comprometerse con la causa. Así, formó la ONG “Latidos sin Pausa” y en Catamarca es la referente de la Red de Sobrevivientes de Abuso Eclesiástico.

En una charla con El Ancasti, señaló que lo positivo de esta Comisión, luego de los casos que se dieron a conocer en los últimos años, es que la Iglesia “hace algo, por presión o por lo que sea”.

“Después de todas las condenas, oh casualidad, el Papa determina que se abran todos los archivos y todo lo que escondieron. Para nosotros no es válido. Ellos mismos van a estar; van a seguir escondiendo. ¿Dónde está la confianza de que se manejen con imparcialidad? Hicimos ese análisis. Es como para dar un poco de tranquilidad, con tantos casos que hubo en Argentina y en cada provincia, los casos que fueron elevados a juicio y los juicios que ya se hicieron. Es como decir ‘bueno, vamos a participar en algo’. Entonces, se guardan la posibilidad de manejar todo”, comentó.
Integración

Para la referente, resulta importante que esta Comisión, abocada a una temática tan sensible, esté integrada por miembros de otras instituciones. Una comisión, que reciben ‘informes’ de religiosos acusados de abuso sexual, integrada solamente por miembros de la misma Iglesia deja sabor a poco. “No sé hasta qué punto podemos consultar porque ellos nunca estuvieron abiertos. Se debe garantizar la imparcialidad, sino quedamos en la misma. Si no tenemos la posibilidad de integrar esa comisión, qué nos garantiza que se hagan bien las cosas o que apliquen la Justicia como corresponde. Es más de lo mismo pero dicen que tienen una comisión que se va a encargar de los casos de pederastia pero son ellos mismos. No dan apertura a la opinión de todas las ONG ni a la Red, que está en todas las provincias y en cada una hay un referente. Tampoco nos notificaron ni nos dijeron si podíamos participar o dar una opinión”, resaltó.

Además, con años de caminar los pasillos de los tribunales para que su caso llegue a debate, no quiere perder las esperanzas. Sin embargo, es realista y advirtió que “siempre, con o sin comisión, ellos siempre van a ocultar o van a decir ‘sí, estamos trabajando’ pero nunca muestran; es muy superficial y muy hipócrita lo que dicen. Va a ser como recibir, hacer un favor; las causas están en curso por la justicia común; ellos manejan su propia justicia y a su conveniencia. Siempre va a ser a conveniencia; no van a decir ‘hay que meterlo preso’”.

Por último, la referente de esta red argentina comentó que se sabe que hay más casos “que no están denunciados y que no van a apoyar”. Seguramente, estimó, van a tener sus tácticas, como veían haciendo: “ocultar y trasladar. No sabemos de qué manera van a proceder y cuáles van a ser los puntos que van a manejar y si los van a dar a la comunidad; tendrían que poner el informe a consideración para acceder a la información”.

El concilio del deshonor y de la lujuria

El obispo de Catamarca, Luis Urbanc, a través de un comunicado de prensa, informó que tras la publicación de la Carta Apostólica del papa Francisco “de Motu Proprio ‘Vos estis lux mundi’”, en mayo último, nombró una Comisión de Abusos Sexuales para la recepción de informes.

Para tal fin, fue designado el presbítero Julio Quiroga del Pino, quien contará con la colaboración de sus pares Julio Alejandro Murúa, Salvador Armengol Acevedo y José Antonio Díaz. Las personas que tengan interés o inquietud deberán acercarse hasta la sede del Obispado, en San Martín 655, de lunes a viernes, de 9 a 12.30. La Comisión comenzará a funcionar en febrero.

En Catamarca, junto con el sacerdote Juan de Dios Gutiérrez, Renato Rasguido y Moisés Pachado están acusados por delitos contra la integridad sexual. Pachado renunció a su parroquia en Andalgalá “hasta solucionar sus cuestiones personales ante la Justicia”.

Un protocolo de actuación para luchar y no ceder

La referente de “Latidos sin Pausa” comentó que la Red de Sobrevivientes de Abuso Eclesiástico elaboró un documento, junto con el abogado Carlos Lombardi y la psicóloga Liliana Rodríguez, junto con otros integrantes. “Opinamos sobre cada uno de los puntos a los que el Papa hace referencia –se publicó en una carta en mayo- y sobre cómo lo van a trabajar”, contó.
En agosto último, la Red ofreció un protocolo de 11 puntos con las recomendaciones que deben seguirse a fin de preservar la integridad de quienes deciden denunciar en sede canónica. El objetivo es difundir y alertar, a fin de evitar la manipulación y la revictimización.

En este sentido, se advirtió que “las ‘medidas’ que la Iglesia católica ha llevado y lleva a cabo para ‘solucionar’ el problema que representan las víctimas de abuso eclesiástico tienen objetivos muy distantes de la protección. Éstas están destinadas a blindar la institución, mantener el sistema de protección de pederastas y evadir el cumplimiento de exhortaciones de organismos internacionales”.

Según precisaron, los puntos comunes, entre otras cuestiones, en estos relatos son: utilizan una fina manipulación emocional, cosificando, humillando, aislando a las víctimas de su entorno afectivo. En muchos de los relatos, las víctimas han "pedido ayuda" hablando con algún/a integrante de la parroquia o congregación. “Casi todos coinciden en que las devoluciones que les hacían afirmaban ‘que estaban atravesando una crisis de fe o de vocación’. De este modo aparece otra vez el castigo, el no creerles, el acallarlos, el desdecirlos, el confundirlos", remarcaron.

También señalaron que los abusadores eligen a sus víctimas, ejercen un poder irrestricto, son conscientes de lo que hacen y lo planifican. “No son enfermos”, aclararon. En la mayoría de los casos, los abusadores sostienen que la víctima “los provocó o dio su consentimiento. “Siempre, la relación entre abusador y víctima es una relación asimétrica de poder; nunca puede existir consentimiento, ya que se está bajo manipulación, coacción o reducción a la servidumbre. Llegan a anular el discernimiento y la voluntad”.

Otra cuestión en la que hicieron hincapié fue en “no dejarse engañar por la promesa del resarcimiento económico dentro del procedimiento canónico". Dicho procedimiento se inicia para investigar al abusador y es el principal eje donde engarza el sistema de encubrimiento que mantiene aún vigente la Iglesia católica.

Por último, señalaron que “la regla de oro a aplicar para discernir si la Iglesia católica está actuando legalmente es verificar que esté aplicando en sus organismos las convenciones internacionales sobre Derechos Humanos con la colaboración de profesionales independientes especializados en esta área”.

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