Otra vez las escuelas vuelven a ser foco de los delincuentes, esta vez fue contra la Escuela Juan Pablo II ubicada en barrio El Milagro, de donde se llevaron computadoras y una impresora, y la Escuela Huayra Punco del barrio 920 Viviendas, adonde provocaron daños y destrozos.
Según indicaron fuentes judiciales, en la Escuela Juan Pablo II los delincuentes habrían ingresado durante la madrugada y los docentes se dieron con la novedad alrededor de las 7.30, cuando ingresaban a realizar las tareas diarias. Los desconocidos violentaron una de las puertas de la preceptoría y se apoderaron de dos computadoras completas y una impresora dándose a la fuga sin tocar ningún otro elemento.
Según especulan los investigadores, los malvivientes habrían tenido previo conocimiento del lugar en donde se guardaba dicho equipamiento, ya que fueron directo a los objetivos sin tocar otros objetos que había en el lugar.
En el hecho trabajó personal de la unidad judicial 4 con colaboración de efectivos de la comisaría cuarta y la brigada de investigaciones, quienes durante la mañana llevaron a cabo un allanamiento en los alrededores del lugar con el objeto de dar con el paradero de algunos elementos. Hasta el cierre de esta edición no había novedades al respecto.
En otro hecho similar y en jurisdicción de la unidad judicial quinta, desconocidos ingresaron a la escuela 198º Huayra Punco del barrio 920 Viviendas pero sólo causaron daños materiales. Según informaron fuentes judiciales, los directivos del establecimiento dieron inmediato aviso a la jurisdicción bien se enteraron del suceso pero hasta el momento no se logró dar con los malvivientes.
Inseguridad
En este último tiempo los establecimientos educativos fueron continuamente afectados por el vandalismo por lo que desde el Ministerio de Educación se había anunciado que se contrataría a los jefes de hogar desocupados para que realicen tareas de sereno, cuidando las diferentes escuelas de la ciudad. Según se había manifestado, los jefes hogar trabajarían organizados a través de una cooperativa pero hasta el momento nada se ha concretado.
Si bien en algunos establecimientos –los que fueron castigados en reiteradas ocasiones- cuentan con la seguridad de efectivos policiales, los docentes ven necesaria la incorporación de los jefes de hogar para evitar nuevos daños, que a veces se producen durante el día cuando no hay policías custodiando.
Las negociaciones para implementar el sistema de serenos en las escuelas por medio de jefes hogar desocupados lo realiza la Agrupación “26 de Julio” y se llevaría a cabo con una firma de convenio entre el ministerio y la cooperativa.