Cuando a mediados de junio las autoridades del colegio River Plate se enteraron que un alumno de segundo año había compartido por WhatsApp fotos y videos íntimos en los que aparecía junto con una compañera de su misma edad tomó la decisión de expulsarlo amparándose en su derecho de admisión.
Los padres del adolescente de 15 años quisieron evitar que el chico perdiera lo que resta de ciclo lectivo y solicitaron la nulidad de la sanción y que se dictara una medida cautelar para que su hijo pudiera seguir asistiendo al colegio, pero no tuvieron éxito. La Justicia le dio la razón a la escuela y convalidó la expulsión.
No fue un episodio aislado. La difusión de estas imágenes se sumó a sanciones anteriores por otras faltas, tales como la "falsificación en la libreta de la firma de los padres o usar el celular en clase", señaló Gastón Corti, el Director del Instituto River Plate. "La suma de todos estos elementos nos llevó a tomar una decisión excepcional", sostuvo.
