YPF entregará el acuerdo que firmó en 2012 con Chevron por Vaca Muerta
Con la presentación ante la Justicia, la petrolera responde al pedido del ex senador Rubén Giustiniani, quién solicitó transparencia, ante la reserva de las cláusulas del contrato que se firmó durante la gestión kirchnerista.
La petrolera YPF entregará a la Justicia un acuerdo, de los
26, que firmó con la empresa Chevron el 19 de diciembre de 2012 para llevar
adelante un emprendimiento conjunto en Vaca Muerta, como resultado de la
presentación que realizó el ex senador santafesino Rubén Giustiniani en reclamo
de transparencia ante la reserva con que la gestión de la ex presidenta
Cristina Fernández de Kirchner mantuvo este contrato.
La presentación de YPF se concretará mañana -antes de las
13- ante el Juzgado Contencioso Administrativo Federal N° 7 en función del
dictamen que emitió la Corte Suprema de Justicia el 10 de noviembre de 2015,
cuando ordenó al Gobierno hacer públicas las cláusulas secretas del acuerdo.
"Ganó Giustiniani. Hay que ser buen perdedor y cumplir
con la ley. De todas maneras, recientemente se sancionó una ley de acceso a la
información pública que claramente nos protege y deja mucho más claro el tema.
Por eso, nuestra visión es que, más allá de la buena voluntad, si se sienta
precedente es un daño muy fuerte para YPF y sus 20.000 empleados, ya que los
inversores se van a retraer si a la hora de firmar un contrato con YPF se
encuentran en una vidriera", señaló Sebastián Mocorrea, vicepresidente de
Comunicación y Relaciones Institucionales de YPF durante un contacto con la
prensa en la sede central de la petrolera.
Los acuerdos contractuales entre YPF y Chevron por la
explotación de hidrocarburos en Vaca Muerta involucran a una serie de empresas
subsidiarias que incluyen una cepa adicional de protección en holdings de
Uruguay y Bermudas, con el objetivo de evitar eventuales embargos por
conflictos latentes que involucraban a una y otra parte en el momento de firmar
los contratos: fondos buitre en el caso argentino y derrame en Ecuador por el
lado de Chevron.
La operación se realizó a través de 26 contratos, de los
cuales 12 fijan los términos y las condiciones legales y comerciales de la
inversión y operación, mientras que los 14 restantes hacen foco en el
cumplimiento de las condiciones contractuales, en función de las acciones de
Chevron.
Uno de esos 26 contratos -que lleva por título Proyect
Investment Agreement (PIA- será entregado por YPF en sede judicial antes de las
13, que es el horario tope fijado por la justicia.
De esta forma, la petrolera cumplirá con los sucesivos
fallos judiciales que llegaron hasta la máxima instancia, la Corte Suprema de
Justicia, que avalaron la presentación del ex senador santafesino por el
socialismo Rubén Giustiniani, en cuanto al acceso a los detalles y las
cláusulas del convenio.
Mocorrea anticipó detalles de la respuesta que la empresa
dará a la Justicia durante una presentación a la prensa de los acuerdos con
Chevron. En ese marco, el ejecutivo de la petrolera argentina se limitó a
transmitir la posición de YPF de cara al escenario judicial, acompañado por
Daniel González (Vicepresidente Finanzas-CFO); Germán Fernández Lahore
(Vicepresidente de Servicios Jurídicos) y Pablo Vera (Gerente de Desarrollo de
Negocios).
"El acuerdo con Chevron no es más secreto que la
mayoría de los que tiene esta compañía, con las reglas de confidencialidad y
estándares normales del mercado, regidas por el derecho privado. YPF es una
sociedad anónima, no es monopólica, y compite con otras empresas", remarcó
Mocorrea.
Más allá de que en sede judicial se cumplirá con la
formalidad de entregar "uno de los 26 contratos firmados, no tenemos nada
que ocultar y pondremos la totalidad de los mismos a disposición", dijo el
responsable del área de Comunicación de la petrolera.
"Vaca Muerta necesita entre 20.000 y 25.000 millones de
dólares de inversión en los próximos 6 años para ponerse en escala. Si se logra
este objetivo Estados Unidos y Argentina van a dictar las reglas de
juego", añadió Mocorrea.
Durante el contacto con la prensa, González detalló cómo, y
cuándo, fueron los desembolsos de Chevron para el proyecto Loma Campana en Vaca
Muerta y aclaró que la totalidad de los recursos "ingresaron directamente
al Banco Central" y suman hasta el momento "2.800 millones de dólares
al tipo de cambio oficial, lo que da un promedio de 7,90 pesos por dólar
ingresado".
"Los dólares entran de Estados Unidos directamente a la
Argentina, no pasan por ningún paraíso fiscal ni por cuentas de individuos, por
lo tanto no hay ninguna sociedad ni cuentas a nombre de ejecutivos de YPF. Cada
dólar que salió de Chevron terminó en Loma Campana y entró por el mercado
oficial", añadió González.
De todas maneras, el ejecutivo admitió que con la premisa de
"blindar los flujos de fondos" se diseñó una "estructura
compleja" de sociedades al sólo efecto de impedir eventuales de riesgos de
"dólares que pudiesen quedar en el camino".
En este contexto de crearon las siguientes sociedades:
Wokler Investment S.A, YPF Shale Oil Holding Ltd., YPF Shale Oil Investment I
LLC, YPF Shale Oil Investment II, LLC y Compañía de Hidrocarburo No
Convencional S.R.L.
Esta estructura, según afirman en YPF, le da un marco de
protección a la inversión productiva de ciertas contingencias legales y la
subsidiaria Chevron asume plenamente el riesgo petrolero, tanto desde lo
económico como desde lo operativo.
Los ejecutivos, además, subrayaron que "YPF administra
pero el interés económico es de Chevron, ya que pusieron todo el capital y
todos los flujos existentes corren por estas sociedades".
Una vez realizada la prueba piloto, Chevron tenía la
posibilidad de retirarse bajo la retribución de "tomar por 35 años el 50
por ciento de la producción de los pozos perforados con su plata. Y Chevron
decidió continuar".
Si bien YPF entregará a la Justicia el contenido de uno de
los 12 contratos principales, en los restantes 11 se fijan los términos y
condiciones legales y comerciales de la inversión y operación.
Por ejemplo, en el Farm-in se contempla la cesión del 50% al
socio para que ponga todo el capital necesario. El JOA-UTE es un acuerdo de
operación conjunta; el GIPCA va por el lado de la garantía de cumplimiento de
obligaciones contractuales y de mantenimiento de la estructura societaria.
Otro contrato, el ECA, regula desembolsos de aportes de
capital; el ICLA regula desembolsos a través de préstamos; el TSA 1, regula la
contratación de servicios técnicos de socios por parte de la UTE y el TSA 2
regula la contratación de personal del socio asignados a la operación conjunta.
En el DECRE BENEFICTIS se cede al socio los derechos
establecidos en el decreto 929-13. El GAS SALE AGREEMENT prevé un acuerdo de
monetización conforme a Plan Gas igual que YPF. Y en el CRUDE OIL PURCHASE
AGREEMENT se establece un acuerdo de compra de crudo a opción de YPF,
mensualmente y a precio de mercado vigente.
Por pedido de Chevron se designó al banco HSBC como agente
fiduciario, que, por otra parte, según admitieron los cuadros técnicos de la
compañía argentina, "ha sido uno de los bancos que más nos ha
financiado".
Los eventuales conflictos entre partes, de acuerdo a sus
características, tendrán dos escenarios para dirimirse: por un lado la ley de
Nueva York y por otro la Cámara Internacional de Comercio, con sede en París.
Según informaron en YPF hasta junio de este año el impacto
del proyecto de inversión en Loma Campana produjo los siguientes resultados:
actividad en 500 pozos (29 este año), un acumulado de inversión total que
alcanza los 5.250 millones de dólares y un ingreso de divisas por parte de
Chevron que se ubica en torno a los 2.800 millones de dólares.