Al menos dos personas, entre ellas una mujer kamikaze, murieron y otras siete fueron detenidas ayer en un suburbio de París durante el operativo policial en busca del presunto cerebro de los atentados del viernes, el belga Abdelhamid Abaaoud.
De acuerdo con la información que se dio a conocer ayer, un yihadista de 28 años, conocido también como Abu Omar al Baljiki ("el belga") y a quien se le atribuye la planificación de los atentados de la semana pasada habría sido muerto durante el operativo.
Abaaoud habría burlado los servicios de inteligencia al instalarse en París y habría logrado su cometido el viernes en París. La investigaciones venían desde hace tiempo y la policía determino que podría encontrarse en el departamento de Saint Denis, al norte de París, explicó el fiscal que trabaja en la causa.
Unos 110 policías de élite, de los que seis resultaron heridos, lanzaron el asalto de madrugada en pleno centro de esta localidad.
La operación antiterrorista se llevó a cabo a menos de un kilómetro del Estadio de Francia, uno de los blancos de los ataques reivindicados por el Estado Islámico que dejaron 129 muertos y 352 heridos.
Dos sospechosos atrincherados murieron en el operativo, una mujer que detonó su chaleco de explosivos y un hombre "alcanzado por proyectiles y granadas".
Tres de los siete detenidos se hallaban en el interior del piso, dos trataban de esconderse y otros dos estaban en las inmediaciones del edificio.
Según las versiones, el departamento habría sido alquilado a los yihadista, como un favor a un amigo, desconociendo que se trataba de terroristas.
Investigación
En cinco días de investigación, los policías lograron remontar la pista y establecer la secuencia de los ataques, "actos de guerra planeados en Siria, organizados en Bélgica y cometidos en Francia" con cómplices franceses, según el presidente François Hollande.
Nueve hombres participaron en los atentados: tres kamikazes en las inmediaciones el Estadio de Francia en Saint-Denis, otros tres en la sala de conciertos El Bataclan y tres más que dispararon de forma indiscriminada contra bares y restaurantes. De los siete kamikazes, cuatro fueron identificados, todos ellos franceses, de los cuales al menos tres combatieron en Siria.
Italia en alerta
Ayer Italia decidió aumentar su nivel de alerta en sus principales monumentos en el Vaticano, Roma y Milán tras advertencias provenientes de la Agencia Federal de Investigaciones Estadounidense (FBI) sobre posibles atentados. La plaza San Pedro, la Catedral de Milán y su famosa Scala son algunos de los posibles objetivos, habría indicado el FBI, que también habría suministrado información sobre cinco individuos potencialmente peligrosos.