Doña Martina y sus dos hijas viven en un rancho improvisado de nylon en cercanías de la Escuela N°89 de Corral Blanco, departamento Belén. Es que la familia tiene su precaria casa a más de 13 kilómetros de la escuela donde concurren las jovencitas. Fue doña Martina quien decidió hace dos años armar el rancho para evitar que sus hijas caminen cerca de 30 kilómetros diarios. Los vecinos y los medios de comunicación de Belén informaron el caso y ahora se conoció que un comerciante y la comuna podrían construirle un lugar mejor, hasta que las adolescentes terminen el nivel secundario.