Revelaron datos alarmantes sobre la participación de los adolescentes en apuestas
Un informe da cuenta que los varones son quienes más apuestan, quieren tener dinero y muchos no pueden parar.
Uno de cada cuatro estudiantes de escuelas secundarias participó en apuestas online al menos una vez y casi la mitad lo hizo en sus hogares. Son más los varones, un 71%, entre quienes lo hicieron, que las chicas que representan el 25%. Así lo reveló un informe que presentó ayer la Defensoría del Pueblo de la Ciudad de Buenos Aires, con la idea de aportar datos oficiales sobre este fenómeno.
Los chicos lo hacen porque quieren ganar plata. Ese fue el motivo más frecuente elegido por quienes contestaron la encuesta en la pregunta abierta sobre las motivaciones para apostar. De hecho, el 67% de los comentarios analizados refieren a esta razón. Los estudiantes ven a la apuesta como una manera rápida y sencilla de tener ingresos, lo que les permite acceder a productos, salidas o incluso a una forma de autonomía económica. Un 25% de las respuestas indican que lo hacen para entretenerse. El dato más preocupante es que el 13,1% de quienes apuestan habitualmente encuentra muy o bastante difícil detenerse, independientemente de si están ganando o perdiendo, publicó recientemente Diario La Nación.
A su vez, mientras que un 39% de los encuestados no sabe si juega en lugares oficiales o no, entre quienes sí lo conocen, un 36% dice hacerlo en plataformas oficiales, pese a que la legislación en la Ciudad dice que solo pueden participar de este tipo de juego las personas mayores de 18 años y aunque existen diferentes campañas para restringir las apuestas, en el entorno escolar o imputando a quienes las promueven. Las ilegales, en tanto, se ubicaron en tercer lugar con el 24%. Es decir, del total de quienes pueden identificar el tipo de plataforma en la que apuestan, el 60% afirma utilizar sitios legales, frente a un 40% que reconoce hacerlo en plataformas ilegales.
Los datos surgen del trabajo “Adolescentes y apuesta online. Diagnóstico sobre un fenómeno que trasciende el entorno digital”, que la agencia realizó entre julio y septiembre pasados a partir de una encuesta en la que participaron 2.765 estudiantes, de entre 12 y 19 años, de 25 escuelas secundarias distribuidas en las 15 comunas porteñas, tanto de gestión estatal como privada. Según el análisis del estudio, el creciente fenómeno de las apuestas online entre adolescentes es transversal y no hallaron diferencias significativas por los niveles socioeconómicos de los estudiantes, el tipo de escuelas a la que asisten –privada o pública– o la zona geográfica donde viven.
Sí existe, en tanto, una diferencia marcada respecto a quienes participan de esta forma de juego: el 33,5% de los varones encuestados indicó haber apostado online, y 13,7% de ellos reconoció que le cuesta “mucho” o “bastante” dejar de hacerlo. Mientras que un 12,9% de las mujeres reconoce haber participado en apuestas y apenas un 2,5% con frecuencia. Además, la frecuencia de esa modalidad de juego aumenta a medida que los estudiantes avanzan en su trayectoria escolar, alcanzando un 30% entre los alumnos del último año de secundaria.
Falta de control
Apuestas online, OnlyFans, influencers, streamers, gaming: el juego virtual es una cara de un problema más amplio, la monetarización de las adolescencias. María Rosa Muiño, la defensora del Pueblo de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, criticó lo que consideró una línea argumental oficial que convierte a los más chicos en adolescentes-adultos. “Creo que en algunos casos hay un problema de ejecución, de falta de control, de seguimiento del Estado. El oficialismo armó un caminito discursivo que después apoya con los hechos: habilita que los menores de 13 años operen en bolsa, están discutiendo la baja de la edad de imputabilidad, están poniendo en discusión si los niños en vez de ir al colegio tienen que poder elegir ir a trabajar. Están construyendo un adolescente-adulto, un niño-adulto que tiene que generar recursos para sí mismo, para la familia, para lo que fuere”, consideró en relación con el rol del Estado sobre esta problemática.
Y agregó: “Nosotros entendemos que hay un problema y le queremos sugerir al Estado, después de un estudio serio, con un montón de elementos y herramientas, un posible rumbo. Y el discurso oficial más importante va en sentido contrario”.
En base a los resultados obtenidos, en sus conclusiones, el estudio desarticula dos ideas instaladas: que los adolescentes apuestan en el colegio y que la mayoría de estas están relacionadas con el deporte.
Consideran que la escuela ha funcionado como un ámbito de alerta temprana sobre esta problemática, pero no es el principal lugar donde los adolescentes apuestan dado que menos del 10% indicó hacerlo allí, mientras que un 47,9% dijo que fue en su casa.
En cuanto a las preferencias de juego, marcan que los casinos virtuales son los más elegidos (48%), seguidos por las apuestas deportivas (32%) que están limitadas por el tiempo, ya que solo pueden realizarse durante una competencia.
También se observó un fuerte componente social en esta actividad: el 39% de los estudiantes prefiere apostar en grupo. Y ante la consulta sobre cómo conocieron las plataformas de apuestas online, el 60% contestó que accedió a través de amigos o conocidos, mientras que solo el 19% lo hizo a través del consejo de influencers.
“Otro dato importante y es el espíritu con el que nosotros trabajamos es que no es difícil ir a preguntarle a los chicos. El gobierno de la ciudad podría haberlo hecho y hubieran tenido una muestra mucho más grande que la nuestra, antes de tomar decisiones de política pública sin datos. Nosotros, como ellos, trabajamos con supuestos, la diferencia en este caso es que fuimos a buscar los datos que nos dieran la razón o que nos sacaran del error en todo caso”, apuntó Muiño y agregó que están trabajando en una campaña dirigida a las familias.
Como algunas de sus medidas para abordar esta problemática, el gobierno de la Ciudad, encabezado por Jorge Macri, reguló el uso de los teléfonos celulares en las escuelas, intimó a influencers por identificarlos como promotores de plataformas de apuestas ilegales y también cerró la inscripción a nuevas licencias para operadores de apuestas.
La gran mayoría, el 90%, afirmó que utilizan billeteras virtuales como medio de pago para apostar, un porcentaje que refleja la digitalización de las transacciones entre los adolescentes y la facilidad de acceso que ofrecen estos medios para participar en las apuestas online, generan adolescencias con problemas de adultos. Antes las picardías eran otras”, describió Monserrat Neme, una de las autoras del estudio que participó de la toma de encuestas.