El tejido de alfombras fue declarado patrimonio cultural inmaterial
La nueva ley tiene como objetivo cuidar la tradición milenaria en su elaboración, como identidad de la provincia de Catamarca.
En la última sesión de la Cámara de Diputados, quedó aprobado que el tejido de alfombra es Patrimonio Cultural Inmaterial de Catamarca, con la técnica artesanal de tejido nudo por nudo en telar vertical, utilizada en la elaboración de alfombras, tapices, lados de cama y accesorios, en la Fábrica de Alfombras de Catamarca. La iniciativa fue de la diputada provincial Natalia Ponferrada, quien destaca como técnica artesanal a la técnica oriental milenaria denominada “nudo Smirna”, que se realiza nudo por nudo, sobre una urdimbre de hilo de algodón, cuyo diseño es plasmado con anterioridad sobre papel milimetrado.
En la parte resolutiva, Ponferrada aclara que el órgano de aplicación deberá ser el Ministerio de Cultura y Turismo. Y ese sentido, se faculta a esa cartera a promover acciones en articulación con organismos provinciales, nacionales e internacionales.
La ley, tiene como objetivo preservar y revitalizar esta tradición única en Argentina, valorada como parte esencial de la identidad cultural de la provincia. Este reconocimiento se alinea con los principios de la Convención para la Salvaguardia del Patrimonio Cultural Inmaterial de la UNESCO.
El reconocimiento de esta técnica como Patrimonio Cultural Inmaterial no solo busca proteger el saber artesanal, sino también apoyar a las tejedoras que mantienen viva la tradición.
La ley pretende jerarquizar su oficio, mejorar sus condiciones de trabajo y facilitar la comercialización de sus productos.
“El mayor desafío que debe enfrentar la fábrica es el de sostener en el tiempo el saber transmitido a generaciones de tejedoras e incorporar nuevos conceptos de diseños sin perder la identidad. Una fábrica de alfombras que tiene el orgullo de ser la única en nuestro país, formada casi en su totalidad por mujeres catamarqueñas”, dijo textual la legisladora Ponferrada.
Desde su fundación en 1954 por un inmigrante iraní, la Fábrica de Alfombras de Catamarca ha sido símbolo de la provincia y un relevante atractivo turístico. Sus piezas, tejidas con lana de oveja y algodón, son reconocidas por su calidad y sus diseños, que abarcan desde estilos prehispánicos hasta persas y modernos. La fábrica ha alcanzado renombre internacional, con alfombras presentes en sitios como la Casa Blanca y el Parlamento Italiano.
