Camila Azul Ortega Arévalo es una joven comunicadora social oriunda de Catamarca, que ante la inquietud de poder generar un espacio colectivo para las personas que integran la comunidad LGBTQ+, decidió crear el proyecto “Memorias LGBTQ+". Esta iniciativa innovadora y disruptiva para la sociedad en general, pero en especial para la sociedad catamarqueña, inició hace ya 2 años.
En diálogo con El Ancasti, Camila comenta que este “fue un proyecto que propulsé desde lo personal, pero conté con la ayuda para la edición de la fotógrafa Camila Salcedo, y Vane Martínez nos honró con su música para los podcasts”. Además destacó el apoyo la Biblioteca Provincial Julio Herrera que les abrió sus puertas, y el apoyo económico del Fondo Nacional de las Artes.
Como profesional de la comunicación, destacó la importancia de generar espacios de construcción colectiva. “Este podcast nació a partir de la premisa de algunas preguntas básicas sobre sus vidas, y cada uno logró apropiarse de este espacio a su manera. Eso me enorgullece”, comenta la joven comunicadora.
Memorias LGBTQ+ es un proyecto que busca acompañar, ser un oído “amigue” para aquellas personas que se encuentran transitando su proceso de identidad con sensación de soledad. A su creadora este proyecto la interpela a enorgullecerse de quién es y a generar cambios favorables a la inclusión para las actuales y futuras generaciones.
Al momento de preguntarle sobre la eterna polémica de la aplicación de la ESI en las escuelas de Catamarca, Camila considera que Memorias LGBTQ+ es un proyecto valioso para compartir. “Considero que cada testimonio puede contribuir que los chicos, chicas y chiques se sientan menos solos de lo que alguna vez nos sentimos nosotros. Para que puedan transitar la adolescencia y la primera juventud más contenidos, por lo menos desde los productos culturales que consumen y tienen presentes”, explicó.
¿Cómo continuará Memorias LGBTQ+?
Este lunes se estrenó por Spotify el último capítulo del podcast que ha generado muchos comentarios positivos y difusión mediante las redes sociales. Quedará esperar hasta el año que viene por una posible segunda parte en este formato.
Mientras tanto quienes deseen compartir su testimonio por escrito para compilarlo en un libro digital, pueden enviarlo al mail: [email protected]