Distintas realidades atraviesan los artesanos que tienen sus stands en la Fiesta Nacional e Internacional del Poncho, que se dedican a la platería, trabajos en madera, cerámica, cuero, instrumentos u otros rubros, ya que coincidieron en remarcar que, por ahora, la venta durante los primeros días fue menor que el año pasado, pero indicaron que esperan repuntar en los últimos días, porque generalmente es cuando más se vende.
En el Pabellón Artesanal mucha gente observó los productos ofrecidos desde distintas partes de Catamarca como así también del interior del país y de países vecinos. Rodolfo Robuadi, quien hace artesanías en madera y es de Fray Mamerto Esquiú, señaló que mucha gente recorrió la muestra durante los primeros días, aunque las compras fueron normales. “El problema es que con la crisis las artesanías quedaron como un lujo barato”, reflexionó. Sus productos van desde los $50 hasta los $750.
En el stand de Sabino Milan Tapia, quien hace productos en cuero desde Jujuy, comentaron que no hubo muchas ventas aún y que esperan que pasen los días y la situación mejore. Allí se ofrecen productos baratos desde $40 hasta los $270. Además, pidieron que los colectivos habiliten más temprano su recorrido al Predio, ya que las líneas comienzan a llegar a las 15.
En tanto que Gabriel Cano, quien realiza artesanías con madera, comentó que en su caso pudo vender algo más que el año pasado aunque “siempre el mayor volumen llega en los últimos días”.
A pesar de que la mayoría de los artesanos son tradicionales en el Poncho y llevan años acompañando la Fiesta, siempre hay lugar para nuevos emprendedores. En este caso, Andrea Pollak Nelli, oriunda de Ayacucho provincia de Buenos Aires, quien llegó con la novedosa propuesta de juguetes hechos con madera y con diseños particulares. “Son juguetes libres de estereotipos y reglas, y hechos con madera de descarte”, explicó. Se mostró sorprendida por la magnitud de la Fiesta e indicó que es la segunda feria a la que asiste para mostrar sus trabajos (la primera fue en San Juan).
“Estoy impactada con la provincia y con la Fiesta, me habían comentado que era así, pero no me imaginaba. Todos los días algo vendo”, expresó Andrea, quien aseguró que pretende quedarse unos días más para disfrutar de los atractivos turísticos de Catamarca. Los juguetes van desde los $150 hasta los $1200 uno que tiene luces.
Desde la bodega tinogasteña Kakan, quienes están ubicados en el Pabellón de Turismo, indicaron que el año pasado a esta altura se había vendido mucho más. Ofrecen vinos entre $150 y $250.