Mientras José López, secretario general del sindicato de Peones de Taxis, dio a conocer que a partir del próximo lunes 9 se aplicará en la Capital provincial la nueva tarifa unificada de taxis y remises, la Asociación de Permisionarios de Remises Catamarca (APRECAT) desmintió que exista un acuerdo y adelantó que "no aplicarán un aumento a la tarifa y que resolvieron frenarlo hasta el próximo 15”.
López junto a la Asociación de Propietarios de Autos de Alquiler y la Cooperativa de Taxis enviaron una nota la semana pasada al municipio informando la decisión de aumentar la tarifa que pasará a costar $11 la bajada de bandera y la ficha cada 100 metros será de un $1.10.
El sindicalista sostuvo que hace un año que no se toca el valor el tarifa, pero que era necesario debido a los aumentos que se registraron tanto en combustible como en repuestos e impuestos.
Por su parte, Julio Olivera, de APRECAT, señaló que "la municipalidad nos pidió un tiempo y los remises decidimos aguantar hasta el 15, no entendemos porqué ahora los taxistas anuncian el aumento”.
La Ordenanza Nº 2750/94 (Régimen de Servicio de Taxis y Remises) establece que el titular, los gremios, asociaciones, cooperativas y agencias de taxis deben fijar de común acuerdo y deben comunicar a la Municipalidad cada cambio de tarifas que convengan y comienza a regir para todos los vehículos afectados al servicio de taxis, con cinco días hábiles de antelación a su puesta en vigencia.
Sin embargo, en esta oportunidad y pese a que en octubre las tres organizaciones que nuclean a los trabajadores de los automóviles de alquiler, como la Asociación de Permisionarios de Remises de Catamarca (APRECAT), la Asociación de Propietarios de Autos de Alquiler (APAA) y la Cooperativa de Taxis mantuvieron reuniones con las autoridades de la Municipalidad de la Capital para acordar la suba de la tarifa, hoy se encuentran divididos. Mientras unos anuncian el primer y único aumento del año, los otros se resisten hasta que finalice la primera quincena.