En medio del escándalo, el secretario general del municipio, Rolando Contreras, salió a dar explicaciones a través de sus redes sociales. En un extenso descargo, aseguró que la intendenta hizo uso de su derecho a un receso laboral y reconoció una omisión administrativa en la firma del decreto de traspaso de mando. Además, rechazó que se haya configurado acefalía y acusó a sectores opositores de construir una “novela” con fines desestabilizadores.
“La intendenta de Valle Viejo hizo uso del derecho a un receso laboral. Cuando viaja, debe comunicar que queda en su lugar el presidente del Concejo Deliberante”, explicó. En ese sentido, reconoció que el decreto que comunicaba el traspaso no fue rubricado antes del viaje por una omisión. "Se olvidó ella de firmarlo o alguna de sus asistentes de hacerlo firmar, lo cierto es que se fue, se olvidó de firmar, ¿ok?”, dijo.
Finalmente, Contreras relató cómo ocurrieron los hechos: “Me pidieron desde Protocolo el sábado 24 que le avise al presidente del Concejo Deliberante que debía hacerse cargo de presidir el desfile del domingo porque no estaría Susana. Cabe destacar que no se debe informar los motivos de la ausencia de la intendenta".
“Le dije: ‘Espero que estés en Catamarca, Susana está complicada o enferma, va a estar ausente’”, explicó. Debido a que Cisternas no pudo asumir de inmediato, indicó que le informó al concejal Franco Iramaín que debía hacerse cargo del Ejecutivo. El lunes, al advertirse que el decreto de traspaso no estaba firmado, dijo que el presidente del Concejo igual debía hacerse cargo del municipio y se lo comunicó por nota. "Así se hizo", dijo.
