Piden acusar a Juan Aguilar por homicidio calificado por odio de género y ensañamiento
Para la querella, el acusado torturó y mató con saña. La causa penal por abuso contó con pruebas producidas por el Juzgado de Familia.
La familia de Milagros Vázquez (23), atacada a golpes y puntazos para luego ser asesinada por asfixia mecánica a mediados de julio en el departamento La Paz, pedirá que el sospechoso del crimen, su pareja Juan Carlos Aguilar (53), sea imputado por homicidio cuádruplemente calificado por mediar relación de pareja, ensañamiento, odio de género y femicidio, en concurso ideal.
Si bien el sujeto está detenido desde el día posterior del crimen, imputado por la fiscal del caso Jorgelina Sobh por “homicidio doblemente calificado por mediar relación de pareja y femicidio, en concurso ideal y en calidad de autor”, la querella a cargo de Marcela González adelantó que junto a los familiares “iremos hasta las últimas consecuencias para que sea condenado a prisión perpetua, sin ningún tipo de beneficios”.
Explicó que solicitará el cambio de carátula en base a las pericias realizadas al cadáver y en el paraje La Suerte, donde se cometió el crimen, "porque está más que demostrado el sufrimiento innecesario al que fue sometida Milagros hasta provocarle la muerte. Es como si Aguilar hubiera gozado mientras la golpeaba en partes vitales. Hasta la marca de un arma (machete) que usó quedó en una de sus piernas, al igual que los golpes de puño y varios puntazos con la misma arma. Fue algo brutal", agregó.
"La familia quedó destruida porque dejó a tres niños sin su madre. Aguilar la torturó y la ejecutó provocándole múltiples traumatismos en zonas vitales y asfixia mecánica" con sus manos, remarcó.
Comentó que realizó un recorrido por el lugar donde ocurrieron los hechos, al que Aguilar la llevó en su moto con el pretexto de juntar pasturas, y consideró que lo que vio, sumado a los resultados de las pericias "demuestra cómo la asesinó. Ella luchó por su vida como pudo, con sus manos. Fue golpeada hasta que no pudo defenderse más y aprovechando ese estado de absoluta vulnerabilidad, la mató".
"Signos visibles de que le provocó sufrimiento innecesario antes de causarle la muerte nos llevan a sostener que hubo ensañamiento. Por eso vamos a pedir que se lo acuse, porque deliberadamente provocó sufrimiento a la víctima. No caben dudas de eso", remarcó.
ADN positivo
Aguilar, con quien Milagros tuvo su primer hijo cuando tenía entre 13 y 14 años, fue juzgado en el año 2017 por violencia de género (desfiguró a golpes a la madre de Milagros, de quien era pareja al momento en que la adolescente quedó embarazada), y por abuso sexual. Por la primera causa fue a la cárcel unos meses.
En la segunda fue absuelto por insalvables errores en la instrucción de la causa penal.
La denuncia por los dos hechos fue realizada a fines de 2016 en una comisaría. De inmediato se dio intervención al Juzgado de Primera Instancia en lo Civil, Comercial y de Familia de Recreo a cargo de Adet Caldelari, quien inició una investigación "urgente" y "sumarísima", por la gravedad los hechos.
"Estamos indignados. A partir de una denuncia realizada a fines del año 2016, que recayera en el Juzgado de Familia, salió a la luz que Aguilar venía abusando de Milagros y que estaba embarazada como consecuencia de ultrajes. Los abusos fueron negados por Aguilar en sus declaraciones pero luego, mediante un cotejo de ADN, se pudo demostrar la paternidad de Aguilar respecto al fruto de ese embarazo de Milagros", afirmó.
"Ese juzgado resolvió en el año 2019. El juez Caldelari pidió una serie de medidas. Entre otras, instó a la Fiscalía Penal a que siga con la investigación penal preparatoria y solicitó que Aguilar sea incluido en el Registro de Infractores conforme lo establece la ley 5434 art 64", informó. Sostuvo además que ese registro de infractores "nunca de creó, pese a que está ordenado en la misma ley, que dice que la Justicia debe crearlo".
Aguilar fue a juicio en el 2017 en la Cámara Penal N°1, imputado por la Fiscalía Penal, por entonces a cargo de Duarte Acosta, por dos hechos de abuso sexual con acceso carnal agravado por la situación de convivencia de la víctima y un hecho de lesiones leves agravadas por violencia de género, todo en concurso real y en calidad de autor".
"Como fue absuelto, Aguilar salió sin antecedentes, algo totalmente irracional e ilógico. Por eso esta querella considera que la Justicia abandonó a Milagros Vázquez, a pesar de que rápidamente se demostró -y con una prueba científica-, la paternidad de Aguilar como resultado del abuso. Algo no se hizo bien y la familia de Milagros pide respuestas. Todos merecemos saber por qué murió una mujer, cuyo femicidio pudo haberse evitado", finalizó.
"Tres o cuatro cachetadas"
Cuando Aguilar fue arrestado por la golpiza a la madre de Milagros, en respuesta a que ella le había pedido dar por terminada la relación de pareja que mantenían porque había confirmado el caso de abuso, dijo que le "pegó tres o cuatro cachetadas, nada más que eso", porque supuestamente la mujer le había retirado 6.000 pesos de un cajero automático.
La pericia psicológica realizada en 2016 arrojó índices de personalidad con rasgos de impulsividad e irritabilidad, propenso a la conducta violenta sobre todo en situaciones de estar ebrio".