En obra. Desde hace dos meses la oficina no está abierta al público.
El temporal que el pasado 17 de enero causó severos daños en la provincia, también hizo mella en el Pabellón 24 del Centro Administrativo del Poder Judicial (CAPE). En ese lugar funciona la oficina de la Secretaría de Familia del Ministerio de Desarrollo Social, organismo que tiene a su cargo el Sistema de Protección de Niños, Niñas y Adolescentes. Desde entonces, el servicio no está en condiciones de funcionar al 100 %.
El Ancasti llegó hasta el Pabellón 24. Hacia el costado oeste pueden verse escombros. Dentro, un grupo de obreros trabaja en las refacciones. Fuentes consultadas por este diario indicaron que la atención al público se realiza en el Centro de Cuidados Huaina Huasi y la mesa de entrada de documentación, en el Pabellón 25. No obstante, desde el gabinete social, oportunamente no se informó sobre estas medidas provisorias, hasta tanto las oficinas estuvieran en condiciones. Los trabajos de refacción están a cargo del Ministerio de Infraestructura y Obras Civiles.
Ante esta situación, autoridades del Ministerio de Desarrollo Social junto con referentes de la Asesoría de Menores se reunieron. En la oportunidad, abordaron sobre varios temas y, puntualmente, por los daños causados por el temporal. En detalle, se acordó una reforma estructural y no sólo el daño que generó el temporal, a fin de lograr una importante mejora en el ámbito laboral. A la vez, desde la Asesoría de Menores se pidió a la cartera social celeridad para resolver esta situación. También se envió un oficio (por escrito). Ya pasaron más de dos meses y la obra continúa y no hay fecha de finalización.
Contar con un espacio en condiciones, más aún donde se trabaja con niños, niñas y adolescentes atravesados por distintas situaciones de vulnerabilidad, es fundamental. Al no contar con un espacio acorde, la tarea se acumula porque los operadores no tienen un lugar para trabajar. Para estos profesionales, se hace difícil poder llevar a cabo su labor en óptimas condiciones. Solamente el equipo que se encuentra de turno asiste al lugar de trabajo. No obstante, la mesa de entrada del Pabellón 25 es un espacio muy reducido. Los operadores siguen trabajando, con la ilusión de que las condiciones laborales mejoren para que el Sistema de Protección de Niños, Niñas y Adolescentes funcione al 100 %. Actualmente, uno de los principales casos que se abordan en la órbita del Sistema de Protección es el de un niño de cuatro años que habría sido objeto de una venta. El caso salió a luz por intervención de la División Trata de Personas de la Policía de la Provincia. A fin de protegerlo, el nene fue asistido por trabajadores sociales y psicólogos; se lo entrevistó y se tuvo en cuenta todo lo manifestado por él. Al no haber hallado más referentes afectivos, los operadores del Sistema de Protección decidieron que sea alojado en uno de los centros de cuidado.
Tales medidas se enmarcan en la Ley Provincial 5357 de Protección Integral de Niños, Niñas y Adolescentes que entró en vigencia en agosto de 2013. De este modo, el Ministerio de Desarrollo Social de la Provincia se convirtió en el protector principal de la niñez y la adolescencia. En el artículo 35 de la normativa, se establece que el Sistema de Protección Integral es el conjunto de organismos, entidades y servicios que formulan, coordinan, orientan, supervisan, ejecutan y controlan las políticas, de gestión estatal o privadas, en el ámbito nacional, provincial y departamental, destinados a promover, prevenir, asistir, proteger, resguardar y restablecer los derechos de chicos y chicas.
