Con el asesinato del exministro impune, el fiscal y sus colaboradores reaparecieron en escena en el CAPE.
El fiscal de Instrucción Nº 5, Hugo Costilla, participó en el allanamiento que se realizó ayer en las oficinas del Ministerio de Desarrollo Social, ubicadas en el Centro de Administración Provincial (CAPE), en la ciudad Capital.
La medida se concretó durante la mañana por un periodo de varias horas. El operativo se desarrolló con pleno hermetismo. Costilla estuvo acompañado por colaboradores que, junto a él, investigan el homicidio del ex ministro de Desarrollo Social, Juan Carlos Rojas.
El allanamiento se hizo tras la declaración testimonial del actual ministro de la cartera, Gonzalo Mascheroni. El funcionario estuvo aportando información para la causa el último miércoles.
La reaparición de Costilla en escena se produjo en la misma semana en que se cumplieron los tres años del asesinato de Rojas, con una pesquisa que todavía no generó resultados positivos. En pocas palabras, con un crimen impune.
En la actualidad, hay varias líneas de investigación y aún no son descartadas de manera definitiva. Esas líneas están relacionadas con vínculos sentimentales, familiares y laborales de Rojas. El viernes 7 de noviembre de este año, Costilla encabezó una nueva inspección en la vivienda de Rojas, con el objetivo de obtener material técnico para la reconstrucción tridimensional (Render) de la escena del hecho.
Durante la medida, una arquitecta y un agrimensor realizaron un relevamiento integral del inmueble, a fin de elaborar un modelo digital que permitirá recorrer virtualmente no solo el lugar en donde se halló el cuerpo, sino toda la propiedad y visualizar la ubicación exacta de cada indicio levantado durante la investigación.
El Render 3D funcionará como herramienta técnica y de análisis para el próximo ateneo interdisciplinario, permitiendo a los especialistas observar la escena desde una perspectiva interactiva, con íconos que marcarán los indicios relevados en las inspecciones previas realizadas y su correspondiente información pericial.
De esta forma, se busca fortalecer la comprensión global de la escena y optimizar la exposición técnica de los hallazgos, superando las limitaciones de los registros fotográficos o esquemáticos tradicionales.
Esto también es una imagen del desarrollo del caso: variedad de pericias y escasez de resultados positivos. La realidad de la causa es compleja desde un inicio: debieron hacerse dos autopsias para que se confirme que se trató de un asesinato; hubo serios cuestionamientos a investigadores, peritos y policías que trabajaron en este hecho; los testigos declararon en varias oportunidades; la casa de Rojas fue inspeccionada en más de una ocasión; se hizo un jury en contra de Palacios, proceso del que resultó airoso el fiscal; se pidieron informes a la empresa Google, en Estados Unidos; además, se abrieron celulares y computadoras. Y por ahora, el homicidio no tiene responsables.
