El conjunto "merengue" tuvo una serie de llegadas de la mano de Cristiano Ronaldo que podría haber cambiado el marcador. La más clara sucedió a los 43' cuando el Atlético salió mal desde el fondo y le brindó la posibilidad al Real de armar una jugada rápida. James habilitó al portugués con un toque profundo y Cristiano sacó un potente derechazo que el arquero Oblak logró tapar.
El equipo de Simeone comenzó a animarse con el pasar de los minutos y salió del fondo con prolijidad y precaución. Intentó aprovechar el error ajeno y encontrar la oportunidad para herir la defensa del Real. No tuvo llegadas demasiado peligrosas. La más clara fue un remate de Jesús Gámez de media distancia que quedó en las manos de Iker Casillas.
El partido se transformó en una partida de ajedrez. Los movimientos fueron justos y pensados. Ambos se midieron y controlaron los riesgos que tomaban cada vez que iban al ataque. Fue un duelo a todo o nada, y el equipo "merengue" terminó quedándose con la el triunfo.
Fuente: Infobae