Finalmente, y por unanimidad, en la jornada de ayer los jueces de la Cámara en lo Criminal de Segunda Nominación condenaron a sufrir la pena de 9 años de prisión al padrastro de 32 años que había admitido que violó a la hija de su concubina.
En este sentido, el fiscal Gustavo Bergesio había solicitado la pena de 10 años para el acusado, mientras que la defensora tan solo 8 años.
Durante los alegatos, Bergesio mantuvo la acusación por solo 1 de los tres hechos por los que había llegado imputado.
Así, solicitó que se absuelva por la duda al padrastro por los delitos de abuso sexual gravemente ultrajante y por corrupción de menores, pero mantuvo su postura en cuanto al abuso con acceso carnal agravado por el vínculo pidiendo exactamente 10 años de cárcel para el acusado.
Por su parte, la defensora Mariana Vera, y en vista de que su pupilo había confesado el hecho, solicitó la pena mínima que es de unos 8 años.
El abuso se habría consumado el 18 de agosto de 2013 en la vivienda que compartían el condenado y la niña de 9 años en el centro del departamento Andalgalá y, según determinó la investigación, sucedió cuando la madre de la criatura salió a trabajar y los dejó solos.
Según se pudo conocer, el hombre habría comenzado a "preparar" a la criatura desde que ésta tenía 5 años, mostrándole revistas con imágenes pornográficas.
Con el correr de los años el sujeto comenzó con los abusos.
El día en que la ultrajó, pese a las amenazas que él le profirió, la menor le contó lo sucedido a su madre, quien inmediatamente radicó la denuncia.
Durante el inicio del debate, tanto la víctima, que actualmente tiene 12 años, y su madre, ratificaron la denuncia realizada contra el acusado.
Los jueces Luis Guillamondegui, Jorge Álvarez Morales y Rodolfo Bustamante emitieron un fallo unánime de 9 años de cárcel para el padrastro.