viernes 29 de marzo de 2024
CARTA AL DIRECTOR

Sobre un procedimiento policial en la caminera de Huillapima

Me dirijo a usted para informarle que el día 10 del corriente mes mi hijo Elías Anwar Machicote me llama por teléfono desde Saujil, Pomán, alrededor del mediodía porque había tenido un accidente en su ojo y que viajaba urgente a la ciudad Capital para atenderse. De inmediato me pongo en contacto con el Dr. Hausberger, oculista, quien me dice que a las 17 horas esperaba a mi hijo en su consultorio.

Al llegar a la caminera, la Policía detiene más de una hora la camioneta en la que iba mi hijo para hacerle una boleta de infracción de tránsito por carné vencido, Nº 00009321 de la Municipalidad de Huillapima, pese a que les avisó a los policías el problema de salud que tenía. Aun así le hicieron perder a él y al Dr. Hausberger, que lo esperaba, un precioso tiempo.
Nadie debe sufrir las consecuencias de un personal policial incompetente, irresponsable, inconsciente al detener un vehículo de una persona que viene en emergencia de salud por un problema menor.
Me pregunto: ¿si mi hijo pierde un ojo por culpa de la inoperancia, inconciencia e irresponsabilidad de una actuación policial, quién es el responsable?

Hace dos mil quinientos años, la Justicia dada por Dios a los hombres era ojo por ojo, diente por diente. El que causaba un daño a otro debía recibir el mismo daño causado. Esta ley era para que las personas adquirieran conciencia y responsabilidad en sus actos. Pero no hemos aprendido nada de esto y a nadie le importa nada de nadie. Todos los días tenemos el ejemplo de esto. Pero los ignorantes no saben que esta ley tiene vigencia por la eternidad.

En el libre albedrío, Dios confió y le dio al hombre el poder de administrar justicia, pero esto es un fracaso, hay una total injusticia: prueba de esto lo tenemos a diario. Cuántas veces Dios se arrepentirá de haber creado al hombre. El poder del dinero, la corrupción, los intereses, la poca conciencia han hecho que la Justicia sea una verdadera injusticia. Las personas cuando dejan su cuerpo lo único que llevan y le pertenece es su actuación en la vida. Y el daño que han causado a otras personas lo deberán sufrir en su propia alma. Son ignorantes las personas que actúan en contra de su propia vida, lo que se siembra se cosecha. Pero éstos son los vivos ignorantes que hoy tenemos, y que tenemos de sobra para exportar.
Como padre responsable de mi hijo, a quien amo y doy mi vida, espero que se recupere por el bien de todos y que esto solo sea una nota.

Como ciudadano, Sr. Marcos Denett, mi deber es informarle. Todos somos responsables de nuestra conducta en cada acto de nuestras vidas, en el lugar que estemos u ocupamos.
En mi vida he sido víctima de muchas injusticias, pero mi paciencia tiene un límite. Si superamos ese límite, lo único que sé es que no iré a pedir justicia a los hombres.
Considero que los integrantes de la fuerza policial deben ser personas idóneas que sirvan a la sociedad con responsabilidad. Nadie le devuelve un ojo a nadie, ni menos la vida a nadie. Por esto solo queda hacer justicia con el responsable inconsciente que produjo el daño. 
Mi hijo posee la boleta de infracción y el informe médico.
Sin otro particular, lo saludo atentamente.

Oscar Alfredo Machicote
DNI 10.010.456
Mutquín, Pomán

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