9 de octubre de 2006 - 00:00
Cuando la limosna es grande hasta el santo desconfía, dice un popular adagio que podría aplicarse a una sorprendente decisión que adoptó el Obispado de Catamarca respecto a su patrimonio. En efecto, según se informó el viernes pasado, la cúpula de la Iglesia local condonó una más que significativa deuda que mantenía la familia Castiglione, dueña del diario El Liberal de Santiago del Estero, por la compra del diario La Unión en 1998. El “perdón” de la acreencia habría sido ratificado en una escribanía local por el ecónomo del Obispado, de apellido Lizárraga, en el contexto de las acciones legales y económicas que llevó a cabo cuando resolvió transferir el manejo del decano de la prensa a manos privadas. Pero la incursión de los empresarios santiagueños fue más que breve, ya que al poco tiempo de su desembarco vendieron el diario al grupo económico que encabezan los concesionarios del Casino provincial.