"Como ella es de este lugar y es devota de Jesús nos pidió oración y ayuno para recibir un milagro. Nosotros pedíamos que Jesús Misericordioso le devuelva la vista, que pudiera ver su rostro, y bueno, ese día Jesús nos quiso dar la vista a todos, pero fue ella la primera en notar lo que pasaba. En un momento de la oración nos dijo parece que hay una mancha en el rostro de Jesús", relató Laura Larosa.
"Nos pusimos a mirar y cuando lo hicimos, vimos una gruesa gota de sangre que salía de sus ojos. Empezamos a llorar todas. Fue algo muy fuerte", agregó.
Según contaron las testigos, todavía no contaron lo sucedido a las autoridades eclesiásticas y esperan que a partir de este milagro, la Iglesia vuelva a tener sacerdote para celebrar misas ya que desde hace más de un año la iglesia no tiene párroco.
"Queremos volver a celebrar misas, así que como para nosotros, ésto que pasó es un milagro esperamos que ello ocurra pronto".