Desde hace tres meses, Volkswagen y General Motors -las dos terminales que se disputan el liderazgo de mercado- se lanzaron a una dura puja por atraer clientes con bonificaciones que llegan hasta $ 50.000. En algunos casos, esta rebaja significa un descuento real de más del 15%. Si se toman los valores que publica la Cámara del Comercio Automotor para esos modelos con un año de antigüedad, en casi todos los casos, comprar un auto nuevo es más barato que uno de segunda mano.