Atlas es un conejo de la especie conocida como "gigante Continental", tiene sólo siete meses de vida, pero ya tiene el tamaño de un perro, y va a seguir creciendo.
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Los dueños del conejo dicen que ya no pueden cuidarlo, que no está cómodo en las condiciones en que ellos pueden alojarlo, y por eso recurrieron a la Sociedad Escocesa de Prevención de la crueldad contra los animales para que les encuentren una solución.
La respuesta fue una convocatoria a través de las redes sociales y los habituales medios de difusión de la entidad para encontrarle una nueva casa a Atlas.
En el pedido de adoptantes se indica que el animal necesita mucho espacio para poder moverse y que tiene un hambre colosal: come un gran atado de heno por semana y 2.000 zanahorias y 700 manzanas por año.
Actualmente mide 1,2 metros pero va a seguir creciendo considerablemente porque aún es un adolescente.
Pero no cualquiera podrá ser el nuevo dueño de Atlas; además de espacio y dinero para alimentarlo, los responsables de la búsqueda piden que el adoptante tenga los conocimientos necesarios como para hacerse cargo de él, por lo que sugieren que sea alguien que ya haya tenido un conejo gigante anteriormente.
Además, la Sociedad llena de elogios al conejo: es amigable y aunque da muestras de fuerte carácter, eso mismo lo hace más gracioso.
