Córdoba (NA) - El gobernador de Córdoba, José Manuel De la Sota, pidió hoy penas más duras para quienes inicien, intencionalmente o por negligencia, un fuego que después corra riesgo de transformarse en un devastador incendio forestal, como el que azota varias zonas de la provincia.
"No puede ser que tengan penas de 3 a 4 años. Habría que darles 10 años como mínimo y al que se lo encuentre prendiendo fuego, que no tenga libertad condicional, que no salga de la cárcel, son asesinos", dijo el funcionario. Durante la visita al Hospital Domingo Funes de Santa María de Punilla, donde se encuentran evacuadas preventivamente varias personas, De la Sota comparó a quien prende fuego con un asesino.
"El que prende fuego irresponsablemente es un asesino, es como el tipo que cruza un semáforo con luz roja a 200 kilómetros por hora, tiene que darse cuenta que va a matar a alguien", sostuvo. El gobernador consideró que además de las probables pérdidas de vida, hay que tener en cuenta el daño ambiental que se genera con estos hechos.
"No es sólo la pérdida de vidas que puede haber, es también el daño ambiental. ¿Cuánto nos cuesta a los cordobeses todo este combate contra el fuego? El despliegue de personas, de bomberos, de recursos humanos, de camionetas, de autobomba, los aviones trabajando todo el día, eso es costoso", sentenció.
