Si no puedo ver más a Felipe me mato", fue
la terminante respuesta que le habría dado el DT de fútbol infantil Fernando
Sierra a la madre de Felipe Romero, cuando la mujer le dijo que ya
no podría pasar más tiempo en soledad con el chico. La mujer tenía fuertes sospechas sobre
la relación que el entrenador tenía con su pequeño hijo de diez años, que luego
sería asesinado por el DT, en un crimen que conmociona a Uruguay.
Tras el homicidio, el DT se suicidó.
El entrenador infantil del club Defensor de Maldonado, donde
jugaba Felipe, tenía dibujos que
le había hecho el nene, un libro sobre "cómo ser buen padre" y
cartas con frases como "Papá te quiero", "Papá no me faltes
nunca" o "Feliz día del padre", material que fue
secuestrado por la Policía. Sierra tenía una relación muy estrecha con el nene
y su familia: de hecho Felipe se había quedado a dormir varias veces en
su casa, con el permiso de su mamá.
"El niño era parte de nuestra familia, éramos
todos muy unidos. Se pasaba días y semanas durmiendo en la casa de Fernando con
el consentimiento de la madre. Ella lo venía a ver y luego se iba porque tenía
que trabajar. Las fiestas de Navidad también las pasaba con Fernando",
dijo un familiar de Sierra.
El padre del chico asesinado es Luis "Lucho"
Romero muy
popular en su país por su exitoso paso en el club Peñarol. La madre,
Alexandra Pérez, es agente de policía de Maldonado y se había separado del
exjugador, con el que estuvo casada durante cinco años, y con el que además
tiena una hija de de 13 años.
La psicóloga del nene le había recomendado a
la madre que no dejara a solas a su hijo con el entrenador, ella había hablado
con el DT para comunicarle sobre esta restricción, al sospechar de un "vínculo
enfermizo", y el DT habría amenazado con matarse, lo que finalmente hizo
después de asesinar al Felipe. "Si no puedo ver más a Felipe me
mato", le
dijo Sierra a la mujer, de acuerdo al diario El País de Uruguay.
El perfil del homicida
Sierra tenía 32 años y carecía de antecedentes penales. Era el
cuarto de los siete hermanos de la familia, tenía 32 años, era técnico de
fútbol infantil desde hacía cinco años en el Club Defensor y además trabajaba
como jardinero en casas de la Barra de Maldonado. De acuerdo al Consejero de
Educación Inicial y Primaria del distrito, Héctor Florit, el hombre "era
el referente adulto de niño" en la escuela a la que asistía.
En la tarde del jueves, el DT asistió a la colegio N° 2 de
la zona para retirar al chico porque"hacía mal tiempo" y según
dijo tenía el permiso de la madre, aunque mintió. Las autoridades no
sospecharon nada extraño, ya que era conocido en la institución porque iba
seguido al lugar. El entrenador había llegado al lugar en un auto
alquilado, a pesar de que tenía uno propio.
La dirigente del club donde jugaba Felipe, Miriam Sosa,
explicó que el nene jugaba en la categoría de nueve años y que había llegado el
año pasado, presentado por Sierra como"el hijo de unos amigos". "Muchas
veces lo llamaba papá y el niño nunca dijo no quiero estar con él",
explicó la dirigente, que contó que lo llevaba y lo traía y lo tenía a su lado
en las reuniones del club.
El crimen
La Policía encontró ayer los cuerpos de
Sierra y de Felipe en el departamento uruguayo de Lavalleja, al día siguiente
de haber empezado los operativos para hallarlos. El hombre mató de un disparo al
nene y después se suicidó. Las autoridades encontraron inicialmente el vehículo
sobre una ruta y después, cerca del coche, detectaron la mochila del nene,
una billetera con plata y documentos y tres blísters de calmantes (uno de ellos
vacío) que habría sido comprado por el hombre en una farmacia en La Barra.