El presidente filipino que le dijo "hijo de p..." a Obama afirmó que no fue "personal"
El mandatario asiático lamentó sus dichos que llevaron a la cancelación de una reunión bilateral que iba a tener lugar en Laos. Ahora manifestó sentir un "profundo aprecio y afinidad" por el estadounidense.
El presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, lamentó este
martes sus comentarios ofensivos dirigidos a su homólogo estadounidense, Barack
Obama, al que llamó "hijo de puta" y aseguró que no fue un
"ataque personal", luego que la frase llevara a la cancelación de una
reunión entre ambos mandatarios que iba a tener lugar en Laos.
"Lamentamos que (los comentarios) se hayan entendido
como un ataque personal hacia el presidente de EEUU", dijo Duterte en un
comunicado hecho público en la cumbre de la Asociación de Naciones del Sudeste
Asiático (ASEAN) y recogido por medios en Manila.
El mandatario filipino también dijo sentir un "profundo
aprecio y afinidad" con Obama, y afirmó que espera "limar las
asperezas" con EEUU que "son resultado de nuestras prioridades nacionales
y percepciones".
"Nuestra intención principal es trazar una política
exterior independiente a la vez que promocionamos lazos más estrechos con todas
las naciones, especialmente EEUU, con quien hemos tenido una relación
duradera", afirmó Duterte.
Las declaraciones del jefe de Estado de Filipinas se
producen después de arremeter contra Obama, en una comparecencia ante la prensa
antes de partir para Laos, en la que rechazó la intervención de otros países en
su polémica campaña antidrogas, que considera un asunto interno.
Duterte es criticado en numerosas ocasiones por la campaña
contra las drogas que inició en Filipinas desde el 1 de julio y al 31 de
agosto, donde 929 personas murieron en operaciones policiales y otras 1.507 en
ejecuciones extrajudiciales.