Seis allanamientos y un registro domiciliario en comercios y viviendas fueron realizados en la tarde de ayer en Valle Viejo, Capital y Fray Mamerto Esquiú, donde personal de la División Ciberdelitos de la Policía bajo las directivas de la Fiscalía de Ciberdelitos, a cargo de Alejandro Gober, desbarató una banda que clonaba tarjetas de crédito y débito.
Los policías arrestaron a seis hombres de apellidos Silva (32), Ridulfo (40), Sierra (42), Vega (46), Acosta (49) y Vera (50).
Secuestraron además 140 mil pesos, una motocicleta Yamaha YBR 125 cc, un teléfono celular Samsung A-30, una Notebook marca Compact, y 11 bolsas del Correo Argentino que contenían tarjetas de crédito, resúmenes de distintos servicios y documentación.
De acuerdo con las pericias preliminares y los testimonios recabados en la marco de la investigación, la banda habría contado con la complicidad de un empleado desleal dentro del Correo Argentino, quien tenía acceso a los sobres que contenían las tarjetas de débito y crédito que debían ser entregadas a sus legítimos dueños.
Presuntamente, el sujeto habría extraído los plásticos para luego entregarlos a sus cómplices, quienes, tras realizar las clonaciones correspondientes y extraer la información necesaria de cada damnificado, regresaban la tarjeta al sobre original que finalmente era entregado a las potenciales víctimas.
Los receptores de los plásticos realizaban operaciones y la banda también efectuaba compras en forma paralela. A partir de las denuncias penales radicadas por los damnificados se inició la investigación, que por su complejidad demandó poco más de dos meses de trabajo y la colaboración de áreas especializadas de la Policía.
Montos pequeños
Siempre de acuerdo a los primeros datos recabados, la banda operaba en forma paralela a los clientes, quienes advertían los faltantes de dinero y movimientos extraños a través de las distintas aplicaciones o los resúmenes de sus tarjetas.
Las tarjetas, una vez clonadas, copiadas o duplicadas, eran empaquetadas o ensobradas nuevamente de manera que no generasen sospechas a sus dueños. La banda realizaba operaciones con los plásticos pero por lo general por montos pequeños de dinero, para evitar que las víctimas detectasen la irregularidad a través de los resúmenes y movimientos bancarios.
Entre otros elementos, el personal policial secuestró las bolsas del Correo Argentino repletos de documentación vinculada a la causa, con sobres de distintas empresas que trabajan con créditos, además de decenas de facturas o boletas de la empresa de energía EC-SAPEM y servicios, entre otros documentos.