Para continuar, suscribite a El Ancasti. Si ya sos un usuario suscripto, iniciá sesión.
SUSCRIBITE Para continuar, suscribite a El Ancasti. Si ya sos un usuario suscripto, iniciá sesión.
SUSCRIBITELa Asociación de Fútbol de Barrios determinó suspender los partidos correspondientes a la 7º fecha del Campeonato Apertura, luego de los incidentes que se dieron en partido entre Libertad y 25 de Agosto, que se disputó en la cancha de San Isidro el pasado fin de semana.
Cuando se jugaban los minutos finales, árbitro, hinchas y jugadores terminaron en una gresca mayúscula a tal punto que una persona fue internada en el hospital "José Chain Herrera".
Miguel Álvarez, vocero de la Asociación de Fútbol de Barrios, destacó que “lo importante es que quien ha generado este hecho ante una reacción de su parte que fue el árbitro, ha tenido la valentía de reconocer su error, ponerse a disposición de la asociación para que se determine que va a pasar con él".
"Las personas que han actuado mal van a ser sancionadas reglamentariamente, esperamos que todo lo que se habló nos sirva para que no se repita esto y los dirigentes tengamos un poco mas de cuidado en la cancha. Los que participaron, tendrán que saber aceptar el hecho de que fueron irresponsables en este caso y lo que les pueda caber como sanción tendrán que respetarla y cumplirla, he notado una total predisposición en los representantes de los dos clubes, ellos ya manifestaron que van a aceptar lo que el Tribunal resuelva para programar la 7° fecha y jugar el próximo fin de semana”, comentó Miguel Álvarez.
Igualmente, destacó la valentía del árbitro al reconocer su error. "El árbitro me dijo que esta persona me insultó toda la tarde y me saqué, tuve una reacción que no se justifica para nada, aquí no hubo incidencia de ningún otro tipo de situación, fue el hecho de que alguien se siente hostigado por una persona y tuvo esta reacción que derivó en todo lo demás”.
El vocero de la Asociación de Fútbol de Barrios, expresó que no se consideró el hecho de los adicionales policiales y de suspender la venta de bebidas. “La realidad es que la mayoría de los clubes sostienen su economía con la venta de bebidas, creo que mas allá de que se pueda revisar esta situación a veces un hecho de violencia no necesariamente es la falta de policías o de una bebida alcohólica, hay personas que van mal desde su casa y se termina generando una situación de violencia”.
