El director técnico de Boca Juniors, Rodolfo Arruabarrena, analiza un cambio de esquema táctico para visitar el próximo jueves a Deportivo Capiatá, de Paraguay, por el partido de vuelta de los octavos de final de la Copa Sudamericana.
Con el objetivo de revertir la derrota (1-0) de la ida en La Bombonera, el "Vasco" dejaría el 4-3-3 que más utilizó en este ciclo y pararía un equipo con línea de tres defensores y dos carrileros para formar un 3-4-1-2.
Tras el triunfo de anoche en Mendoza frente a Godoy Cruz (3-2) por la 12ma. del torneo de Primera División, el plantel arribó ayer a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y desde el mediodía se entrenó en Casa Amarilla.
Si bien en esta primera actividad de la semana no hubo indicios del equipo, trascendió que el cuerpo técnico analiza esta variante para visitar el próximo jueves a Capiatá en el estadio Sportivo Luqueño.
Para llevar a cabo esta idea, el DT se inclinaría por el ingreso del marcador central Claudio "Chiqui" Pérez. En el mediocampo jugarían el chileno José Pedro Fuenzalida y Nicolás Colazo como carrileros por derecha e izquierda, respectivamente, y el doblo cinco lo conformaría Marcelo Meli junto a Fernando Gago.
Federico Carrizo sería el mediapunta y la dupla de ataque estaría integrada por Jonathan Calleri y Andrés Chávez.
De esta manera, el equipo que probaría hoy sería con Agustín Orión; Claudio Pérez, Lisandro Magallán y Juan Forlín; Fuenzalida, Meli, Gago y Colazo; Carrizo; Calleri y Chávez.
Saldrían del equipo entre otros Echeverría, Gigliotti y Marín.
