martes 19 de marzo de 2024
Inseguridad

Los comercios en la mira los asaltantes

Por Redacción El Ancasti
Resultan alarmantes o, por lo menos, preocupantes los datos estadísticos sobre los asaltos en los comercios del país que fueron divulgados recientemente por la Federación de Cámaras y Centros Comerciales, sobre un relevamiento realizado durante el primer semestre de 2014. 

En promedio –revelaron-, unos 4500 comercios son asaltados por mes en la Argentina. Es decir, se estima que alrededor de 150  espacios de ventas padecen algún tipo de ilícito por día en las 23 provincias que componen nuestro territorio nacional. 

Es, sin dudas, una modalidad delictiva que va en aumento y donde las víctimas no sólo son locales sino también vendedores ambulantes con puestos en la vía pública.  "Se debe destacar que estamos observando una tendencia que tiene a comerciantes que trabajan en el mercado informal como nuevo blanco de los delitos. Me refiero a puesteros que venden productos en las veredas o alrededores de los centros comerciales del país”, dijo Rubén Manusovich, a cargo de la entidad. 

Además, indicó que se registró una "mudanza” de la técnica del mecherismo o pungueo, que inicialmente ocurrían en los comercios tradicionales,  a estos nuevos ámbitos de comercialización.  

Durante el segundo semestre del año, lejos de aminorarse los casos de inseguridad, se está visualizando un incremento de los robos en los comercios. "Estamos viendo que hay un tres o cuatro por ciento más de hechos delictivos en los comercios. Por eso, como siempre hacemos, realizamos reuniones con autoridades gubernamentales y policiales de las distintas zonas para llevar adelante medidas preventivas, que desalienten la presencia de grupos delictivos", señaló.

Al respecto, Manusovich advirtió que se viene observando problemas más serios en algunos sectores del país que en otros. "En espacios muy transitados como Once y la avenida Avellaneda en Flores hay oleadas de hurtos, básicamente, cometidos por mecheras o punguistas", ejemplificó.

Asimismo, manifestó que "resulta imposible verificar la cifra de hechos que padecen los comerciantes que operan en el mercado informal, porque las denuncias no pueden ser procesadas, entonces no hay registros. Sin embargo, en las reuniones surge la preocupación por el robo hormiga que padecen en los puestos".

Por otra parte, el titular de la Federación de Cámaras y Centros Comerciales remarcó: "Un punto que destacamos como hecho concreto es que estamos logrando descender la cifra de comerciantes lastimados o directamente fallecidos en asaltos a sus locales comerciales". En nuestra provincia, fue paradigmático el caso del agenciero Robert Durval Machetti, ultimado en mayo de 2010 por unos delincuentes que intentaron robar una elevada suma de dinero de su local.  

En este sentido, Manusovich comentó que para evitar desenlaces lamentables se arribó  "a una política de acuerdos para que las víctimas de robos no reaccionen o intenten detener a los delincuentes". "Cuando se logra generar un puente de diálogo entre los comerciantes surgen respuestas positivas, porque se exige a las autoridades que tomen medidas concretas, como la continuidad de patrullajes o efectivos dispuestos en lugares clave", concluyó.

La situación… en Catamarca

Los delitos contra la propiedad completan diariamente páginas de los periódicos locales. Y, si bien la situación no es tan compleja como en las grandes ciudades argentinas, no se puede desconocer que la problemática está instalada en nuestra provincia. 

Noticias sobre mecheras o punguistas aprehendidas tras un raid delictivo por locales de ropa, kioscos o supermercados, cinematográficos robos a comercios donde los delincuentes, en ocasiones armados, huyen con cuantiosos botines o rumores populares, favorecidos por el boca en boca, sobre denuncias nunca presentadas, inundan nuestra vida cotidiana. 

En agosto, diario EL ANCASTI hizo público el drama del corralón  El Salvador, de avenida México y avenida Brasil, en la zona norte de la ciudad: registraron 10 robos en un lapso de tiempo inferior  a los 8 meses. 

Consultados por este mismo medio, los comerciantes del sector consideraron que se instaló una ola de robos contra los locales desde principio de año y que la mayoría de los robos son perpetrados por menores de edad. 

Antes, en mayo, y con motivo de un violento asalto en una heladería de la zona norte de la ciudad, los vecinos denunciaron que la zona comercial volvió a tornarse insegura, con robos a comercios, pero principalmente con robos a los clientes, especialmente en la zona de la Plaza de Choya. "Los robos volvieron, necesitamos más seguridad”, reclamaron oportunamente. 

Pero la problemática de la inseguridad, no solo afecta a los dueños de los comercios de los barrios periféricos de la ciudad sino también a los asentados en la Peatonal Rivadavia y demás calles céntricas. Un ejemplo es el local Todo Moda que en julio de este año ya llevaba presentada diez denuncias por robos. "Nos viven robando. Una vez hasta me golpearon por perseguir al ladrón. O viene gente de clase alta y también nos roban”, aseguró una de las empleadas de la tienda a EL ANCASTI.


Asalto a la peluquería 

Hace pocos días atrás, se viralizó a través de los diarios digitales y las redes sociales el video que muestra el momento exacto en el que un delincuente armado ingresó a una peluquería de la localidad chacarera de San Isidro. El malviviente se apoderó de 300 pesos en efectivo, una cartera con bijouterie varia y un celular, propiedad de una empleada, llamada Laura Vanesa Vergara y de una clienta, Lucía Paola Seco.
 


 
 
"Es horrible la sensación que sentí. No caía de mi asombro. Es algo que no podés creerlo. Lo principal que sentís es miedo. Al estar yo en ese momento con una clienta no sabía qué hacer. Y opté por quedarme a tranquilizarla a la clienta", relató la empleada de la peluquería.  

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